viernes, 4 de junio de 2010

I got trimm trabb, like the flash boys have.

Sí, los he abandonado peor que si fuesen musulmanas casquivanas y no me excusaré que he estado ocupadísima.

¿Quejas? Por supuesto, a eso vine que no van a negar que es lo único que les gusta, pues si no andarían leyendo a Coelho para que les diga que todo va andar bien o a algún child/franquicia de Disney. Así que seguiré sin resentimiento alguno, que me he levantado tempranísimo y se merecen un poco de mi santo Karma.

Ustedes se preguntarán qué cosa en realidad me molesta, porque sí, les quita el sueño aunque lo nieguen. Y se los voy a decir, porque de entre las muchas cosas que me molestan ya que mi santa paciencia no llega a pesar más de dos gramos irreales hechos de helio, hoy la falta de algo me hizo recordar una de las que más: la falta de respeto.

Y no, no hablo como me dijo don STRANGED-, que muy megamacho andaba pensando que mi enojo se debía a guy issues entre otras cosas; pero no, bueno fuese porque no me interesaría ya que sería un tema fluvial y pasajero, malo es cuando es alguien que en teoría está en tu vida. No a diario porque sería mucho pedir de alguien y sobretodo de este caso particular, es alguien que puede ser como un amigo, probablemente lo sea aunque ahora no le llamo así porque no parece. ¿El tema en concreto? Supongo que más que su culpa (que de tenerla la tiene e infinita) es mis expectativas de que su día tendría dos segundos para avisar que cancelaríamos nuestros planes; excusa o no, no se dispone del tiempo de alguien más. Aunque ha de ser exigencia mía, sí, dos segundos improbables cuando en este caso la facilidad no podía ser mayor ya que la comunicación gracias a cierto aparatejo de una compañía X, es gratis. Pero sí, he de estar exagerando como histérica.

Ya saliendo de este caso concreto que sacaré de mi mente por considerarlo ahora poco digno de mi tiempo así como yo lo fui del suyo, me voy al plano general, aquel que a todos nos ha tocado. Nunca he entendido ese afán de que si no se quiere hacer algo o si se quiere cancelar algo, no se avise. No sé si sea yo solamente, pero creo que al planear algo dejas de hacer otras cosas y limitas tu tiempo con el afán de cumplir con aquello que has pactado. Seguramente es que eso ha de ser del siglo pasado, de las épocas de La Iluminación o de los periodos cuando necesitamos de tal o cual persona y por congraciarnos con ella buscamos no quedar mal. Sí, malditos mis pensamientos dejados en la Edad Media y mi poca gracia para adecuarme.

Lamentablemente no tengo semejante gracia como para aparentar aquellas cosas, pero lo curioso en la naturaleza humana es el periodo que nos tomamos para desaparecer en vez de dar cara a ello o aparecer cuando necesitamos otra cosa ya que finalmente, si se le ha hecho a alguien a quien no le importamos pues no somos sus amigos...le da igual, y si es alguien a quien sí le molestó porque lo es, finalmente nos ayudará por serlo. Esa seguridad parece dar las facilidades para encontrar uno y mil caminos para desencajar afectos posibles, cosa que al momento de tener de pareja a alguien no sucede. A mi no me ha pasado eso de la preferencia, pero en varios casos sí lo he visto en varios tipos de personas, la preferencia por eso y el desvivirse por ser complaciente que es como millones de veces más que mantener una pequeña brecha de moral o como se le llame para no hacer idioteces; pero no, con aquello que probablemente dure que el enamoramiento o la ilusión falsa no tenemos consideración, y me parece totalmente estúpido. Autosuficiencia y el creerte lo suficientemente grande para hacer tus cosas sea verdad o sólo una ilusión que no notas, bien. Ser tan cabrón o cabrona como para no saber distinguir esas actitudes siquiera, buena suerte con el Karma que como bien dicen...Karma is a bitch.