C'est fini

Primero que nada, lamento la falta de atención a este espacio. Tengo una vida considerablemente agitada en varios sentidos incluyendo el Waka-Waka del Facebook.

En química el único momento en el que no hay movimiento es el Cero Absoluto, en escala Kelvin. Creo que algo así es la vida, excepto que el cero absoluto no existe. Podría considerarse un Cero Absoluto a la muerte, pero yo creo en otras vidas y que tras la temida muerte existe más de una dimensión.

Y si así es la vida, con sus momentos de nulidad como cuando alguien termina ebrio en una banqueta del parque, cuando dormimos o alguna otra actividad en la que tengamos poco contacto con el mundo que nos rodea...o simplemente momentos aburridos, dudo que se encuentre un Cero Absoluto para las fases de la vida que llamamos con toda la melcocha existente "Vida Amorosa".

Este post lo estaba planeando hace ya varios días por las desventuras amorosas de un amigo que por estar de viaje no podrá leerlo ahora, ese viaje justamente lo hizo para canalizar un poco la energía acumulada de tanta expectativa que tuvo en la relación de la que acaba de salir.

"C'est fini", "terminamos", "no eres tú, soy yo" (porque yo soy quien no te soporta más), "démosnos un tiempo", "mi vida académica/profesional/familiar/ludópata me absorve", entre otras tan conocidas frases ¿no?

La verdad no veo de dónde ha salido la fábula rusa de que estos fines de hipérbola son tan lamentables, yo creo más bien que son refrescantes y muy saludables. No voy a irme contra quien haya dicho eso porque si no lo hubiera hecho ese alguien sería un/a cobarde que no tiene más remedio que quedarse atascado en un estanque de culpa.

Hay una canción de una banda que para mi, es de las mayores expresiones pop que existe. "C'est fini" es una canción de La Casa Azul que me gusta, no habla de un rompimiento de María la del Barrio o de Rubí o cualquier otra novela de esas que ya forman parte de nuestra cultura; habla de un rompimiento en el que se da la cara y en la que no se niega la añoranza de el "eso" que se va, se acepta y hasta se tiene las agallas suficientes para decir "Y que más da si al principio me querías o no era más que la novedad de salir con alguien fuera de lo normal".

Eso pasa. Conozco más de un caso.

Un rompimiento (mal llamado así, por cierto) no es más que el inicio de algo nuevo...y nada nuevo se puede hacer a partir de cenizas. Y perdonarán (o mejor no) la falta de romanticismo, ¿pero no es un poco monótono?. Me parece que algunos disfrutan esas relaciones interminables superando obstáculos y tanto, espero que esas personas conozcan el significado de individualismo la menos. No hay nada más fabuloso que tener algún tipo de "relación amorosa" con alguien y ante un conflicto en vez de desesperarte decirle "Está bien, regreso en dos semanas, me voy de viaje". Así, salido de la nada.

Muy bonito el amor, las relaciones y demás...a todos nos gusta sentirnos lo más importante para alguien o la prioridad, pero cuando algo no da más no hay para qué forzarlo. Y si se puede salir con un poco de dignidad sin mostrar esa característica enfermiza llamada "necesidad mutua" que desarrollan 8 de cada 9 parejas, sería aún mejor.

No es una afrenta contra el amor, el romanticismo, los McFlurry de Oreo ni mucho menos pero un "C'est fini" no debería ser algo tan temido. Nadie con (al menos) un nano-amor propio se ha muerto por eso, el mundo no da miedo aunque se camine solo en él. Por último, salen cuatro potenciales parejas para cada cual bajo cada piedra del camino solitario que uno pueda elegir. Es cosa de arriesgarse un poquito o simplemente de dievertirse, mera cuestión de inercia.